Los ociosos “posadores”, deberían en su tiempo tener buena relación con el fotógrafo, o bien tratarse de gente importante (autoridades o ricos omes) de la localidad, ya que aparecen en varios posados.
Por su vestimenta se puede deducir que no han arrancado garbanzos ni trillado en era, lo qu en la actualidad se diría «no dar palo al agua».
Es de señalar, que en el género masculino predominaba el sombrero o gorra, tan t´pica de antaño.
saludos.